Las joyas hechas con gemas y cristales semipreciosas deben ser cuidadas de una forma especial para que no pierdan su brillo y energía.
Se recomienda no dormir ni hacer ejercicio con ellas. Evitar el contacto con líquidos como perfume y agua, para que el metal o baño no pierda su color, no se oxide ni se manche.
Tu joya de cristal es única y diferente en su forma y tamaño; y fue elaborada sólo con energía positiva.